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Existen muchos desafíos en la vida que se deben enfrentar con valentía y coraje para salir adelante. Uno de ellos, y quizá el más importante, es el de ser madre pues la mujer se convierte en el hogar de un nuevo ser y dedica su tiempo y esfuerzo a guiarlo, protegerlo y amarlo incondicionalmente.
Convertirse en madre es dar un giro de 180º en la vida. Ya no se trata solamente de la mujer, ahora es la mujer y sus hijos (as), la mujer y su familia. Y ¿qué significa ser madre? Existe un gran bagaje de significados para la madre pues, realmente, es la labor más ardua y amplia que posee una mujer.
La dedicación y esfuerzo es aún más fuerte cuando se trata de una madre universitaria que, constantemente ha de esforzarse para equilibrar su vida familiar y académica. Se busca el equilibrio en pro del desarrollo y bienestar propio y, por supuesto, para sacar adelante al pequeño bebé y a la familia.
Una madre universitaria es fuente de inspiración y compromiso. Poseen la valentía y determinación de luchar por sus sueños y alcanzar sus metas con perseverancia y esfuerzo. Se enfrentan a muchos retos en los que han de demostrar sacrificio y actitud positiva para vencer todos los obstáculos y alcanzar el éxito.
Si de por sí la labor maternal es complicada, lo es mucho más el ser madre y estudiante a la vez. Pese a ello, muchas mujeres han enfrentado el gran reto y, a la actualidad, son un estímulo de superación personal, académica y familiar y, claramente, un gran ejemplo para sus hijos (as) en el logro de objetivos.
Liz Soto y Marla Rivera son estudiantes de Ciencias de la Comunicación de la UPAO y, también, son madres. Ellas son símbolo de superación al ser jóvenes madres universitarias y han obtenido varias experiencias que las han ayudado mucho en su vida personal, familiar y universitaria. Hoy, se sienten felices al vivir en armonía con sus roles de madres y estudiantes.
Al principio fue muy difícil equilibrar ser estudiante y ser madre. Mi hija nació un día antes de comenzar las clases virtuales y no tuve tiempo para organizarme. No sabía cómo o qué hacer con mi bebé en brazos recién nacida y las clases. Esa noche sí lloré, me sentía incapaz de poder hacer todo: estar con la bebé, cuidarla, llevar mis estudios, hacer mis trabajos, reunirme con mi grupo, pero poco a poco fui aprendiendo. El desafío más grande que enfrenté fue el tiempo porque es complicado organizarse para ser estudiante y también ser madre pues, a veces, es muy poco el tiempo. Agradezco haber recibido apoyo de mis padres; de mi pareja que cuidó todo el día a la bebé mientras yo estudiaba los primeros meses; de mis amigos que comprendieron que no siempre podría reunirme a tal hora y de mis docentes que, también, fueron muy comprensivos, aunque no todos saben que soy mamá porque no quiero que me den un trato diferente; al contrario, yo cumplo como estudiante como si ese fuese mi único rol porque sí me esfuerzo bastante. Ahora, tengo un motivo más para seguir estudiando, ya no tomo los estudios a la ligera ni que solo debo cumplir como hija. Ahora, soy yo la que debo cumplir con mi hija porque ella merece tener una madre responsable y una vida de calidad. Delante de todo lo que hago, siempre está mi hija. Ella es mi impulso para salir adelante, ella es la luz en mi vida que me ha faltado tantos años y, gracias a ella, estoy más dispuesta a terminar mis estudios y ser una gran profesional.
Liz Soto, estudiante de IX ciclo de CCOM UPAO.
Muchas veces como madres nos cuestionamos si las decisiones que tomamos, en realidad, son las correctas, pero siempre es posible un equilibrio de roles con una buena organización del tiempo. La crianza de mi bebé fue un gran desafío porque tenía que criarla y estudiar a la vez, reunirme para los trabajos de la universidad, manejar mis emociones porque el post parto me fue complicado y organizarme para cumplir con todo. A veces, les decía a mis amigos que no podía ir a clases o que me ayuden con algún trabajo porque no me alcanzaba el tiempo para terminarlo y muchos sí me ayudaron bastante. Los profesores también fueron muy comprensivos durante mi embarazo y más cuando di a luz porque fue una cesárea de emergencia y tuve que faltar a clases y exámenes. El significado de ser mamá es una gran responsabilidad y darte cuenta cómo, poco a poco, tú misma vas logrando tus metas y lo haces para ser mejor cada día y, sobre todo, mejor para esa personita y así, más adelante, se pueda sentir orgullosa de la madre que ha tenido. Nada es imposible en esta vida. Ha sido una montaña rusa, de altas y bajas, pero todo lo hago para que mi bebé se sienta orgullosa de la madre que tiene y de los desafíos que he enfrentado al ser madre universitaria.
Marla Rivera, estudiante de X ciclo de CCOM UPAO.